Ya vienen las campañas políticas para la presidencia de la República, para Senadores, Diputados y Gobernadores. Ya están a la vuelta de la esquina.

Los gritos de los que amenizarán, las matracas en todo su esplendor, los conjuntos musicales y todo lo que conllevan, en México, las campañas políticas.

Los discursos cargados de promesas, las promesas llenas de fantasías, las fantasías alcanzado ideales y los ideales de la gente que siempre va a estar ahí, esperando el cumplimiento de lo que les ofrezcan.

A nivel Nacional, Claudia y Xóchitl, serán las gladiadoras que se enfrente en una lucha en la que, ya se avizora, no habrá tregua ni cuartel.

En Veracruz, el estado que, podría ser factor de decisión en la elección por venir, también habrá tiro y los aspirantes, con todo lo que da, ya se desplazan a lo largo y ancho de la geografía veracruzana, buscando convencer al mayor número de jarochos.

Por Morena, como es ya sabido, la que pronto dejará de ser secretaría de Energía del Gobierno federal, Norma Rocío Nahle García, es la aspirante más aventajada y se dice que, incluso, desde la Residencia Oficial, en donde se ubican las oficinas del mero Tatiasca, ya recibió la bendición. Por ello, también se dice que hoy lunes, 18 del presente mes y año, la oriunda de Zacatecas, podría empezar a platicar con sectores, organizaciones y con todos los que deba y tenga que platicar para lograr ser la beneficiada con la silla principal de Palacio de Gobierno.

De los demás aspirantes morenistas que andaban como chivos en cristalería, todo hace observar que ya fueron reconvenidos y recibieron el consejo de mantenerse quietos. Ya se sabía, no llegarían muy lejos. Comprobado.

Por su parte, en la alianza PRI-PAN-PRD, los que quieren también andan haciendo su labor proselitista, procurando no caer en ninguna situación anormal o ilegal que pudiera ser sancionada. El caso está por definirse. Las declaraciones están en todo lo alto. Falta ver, en las encuestas, quien es el que resultará favorecido.

Así que, las campañas ya vienen, están a la vuelta y ya huele, desde lejos, todo lo que habrá de surgir de sus profundas gargantas.

El 2024, ya está por llegar. Ya huele a Todos Santos y a Navidad.