Vaya tarea para la semana que hoy empieza, tienen ya los miembros del gabinete federal. En el terreno local, también tiene tarea y cumplir con varias asignaturas pendientes.

Pero, como dijo Jack, vámonos por partes.

Gobierno Federal:

El Gobierno Federal que encabeza el fundador y miembro distinguido de Morena, o sea, el hombre fuerte de Macuspana, Andrés Manuel López Obrador, tiene que atender y resolver, entre otros espinosos asuntos, lo del hackeo a la Secretaría de la Defensa Nacional, de donde fueron sustraídos, se dice, millones de documentos, de los llamados Top Secret y cuyo resguardo debió ser tan eficiente que nunca debieron o debían de salir a la luz pública.

Hoy, el gabinetazo morenista, con esos documentos en manos de hackers profesionales, se encuentra en una gran disyuntiva, toda vez que, repetimos, dichos documentos no debían ser revelados al público. El gobierno está intranquilo.

La publicación y circulación de un libro que en su contenido, ha trascendido, revela, da datos y exhibe información de suma importancia, toda vez que señala, al parecer, con pelos y señales, los financiamientos y financiadores que han soportado la estructura morenista durante 18 años en que el ahora titular del ejecutivo, anduvo en campaña. El tema no es asunto menor y, como dicen en el beisbol, cuando de relevar al pitcher se trata, “ya se ve movimiento en el bullpen”

El tema de los 43 estudiantes de Ayotzinapa, ocurrido un 26 de septiembre,  pero de hace ya ocho años, ha encendido de nueva cuenta las calderas del rencor y la desesperación de los padres ya se ha hecho sentir en toda su magnitud. La desconfianza ante la gran cantidad de mentiras que les han contado acerca de la desaparición de sus hijos, pone en evidencia el engaño del Estado para esclarecer el escabroso tema de los estudiantes de la Normal “Raúl Burgos” en el estado de Guerrero. Los ataques a las instalaciones de la SEDENA, en aquel Estado, hablan ya del alto grado de desesperación así como del aumento del coraje de  los padres, alumnos y maestros que tienen que ver con los 43 estudiantes desaparecidos.

La fallida intervención del Gobierno Mexicano en el conflicto que prevalece entre Rusia y Ucrania, en donde AMLO solicita el cese al fuego y que intervengan tres países como jueces neutrales, aparte de las carcajadas que ha provocado en todo el mundo, podría traer repercusiones para el país. Pacificar un conflicto al otro lado del mundo, cuando la casa está ardiendo en llamas, no es bien visto por nadie. El candil de la calle y la oscuridad de la casa, no es recomendable en ninguna instancia.

Por otra parte, en Veracruz, los problemas siguen en aumento y no se ve que alguien quiera o pueda apagar las llamas que amenazan con incendiar el corral y el rancho en su totalidad.

Las carreteras, los puentes y muchas de las  calles de varias cabeceras municipales, ya no aguantan una pertinaz llovizna, so pena de que se caigan y dejen en la más completa incomunicación a miles de veracruzanos, con la problemática que ello conlleva, pero que parece no quieren entender ni aceptar los de la 4T EN Veracruz.

Los homicidios dolosos, las balaceras constantes, en los municipios más importantes en el estado, los descuartizamientos y toda una gama de hechos delictivos, hacen ver, entender y suponer que la autoridad legalmente constituida, ha sido rebasada por las bandas criminales que asolan la entidad veracruzana.

El desprecio y las ganas de no darle importancia debida a los hechos en los que son masacrados veracruzanos cada día, nos hacen tener un reflejo de lo que catara José Alfredo Jiménez, en Guanajuato, donde – dijo- la vida no vale nada.

El desfalco detectado por el órgano de Fiscalización Superior y que asciende a muchos miles de pesos, sin que se ejerza acción penal en contra de alguno de los responsables, hacen presuponer que el ente está actuando más como brazo ejecutor que como un órgano responsable para investigar y sancionar a aquellos funcionarios que meten la mano al cajón. Los feminicidios van a la alza, los alimentos de la canasta básica, también; y el tema de lo que ocurre en los gabinetes morenistas, están echando más leños al fuego de la sucesión del 24. Aunque antes, claro está, hay que estar atentos qué es lo que pasará en el 2023, con la joya de la corona, el Estado de México y  su Grupo Atlacomulco.