FRACTAL

Dic 31, 2021

FERNANDO F. CANCELA

¡Feliz, apacible y próspero año 2022!- No sé cómo vea usted apreciado lector (a) pero, este 2021debido a la pandemia del Covid 19, fue un año muy duro para todos.

Hay quienes a lo mejor sufrieron pérdidas importantes en su economía, en sus negocios; quienes quizás hayan quedado en la quiebra total.

En lo personal, tuve la desfortuna de leer noticias relevantes sobre el inevitable cierre de una tienda comercial muy tradicional y antigua en Xalapa como lo es “Ollivier” y créame que no conozco a quienes hayan sido sus dueños durante 131 años, pero trague duro, se me hizo un verdadero nudo en la garganta.

Pero más lamentable aún, es el ver cómo se va perdiendo la familia y los amigos. Quien no haya tenido hasta el momento una baja en su familia o entre sus amigos, la verdad es que es muy afortunado.

Incluso, hay quienes nos acostumbramos a vivir no tan solo con la enfermedad, sino también, entre la soledad y la tristeza, entre anécdotas y recuerdos, entre las ganas de volver el tiempo atrás y tener ese espacio tan necesario para volver a ver a nuestros seres queridos.

Pero con todo y lo anterior, cada inicio de año es motivo de nuevos retos, proyectos y metas que cumplir. Es el momento de reflexionar seriamente que podemos ser mejores en muchos aspectos.

Quienes tenemos la bendición de Dios de tener un trabajo, queremos valorarlo más, superarnos en él, en lo que hacemos ser más profesionales; queremos aprender a cómo mejorar nuestras finanzas, a gastar menos para poder tener más; a ser mejores hijos, mejores padres, mejores esposos (as), mejores vecinos, pero también, en lo que se refiere al cuidado de nuestra salud, de nuestro cuerpo.

Por lo regular, la dieta y el ejercicio son parte de este asunto que trato de explicar, sin embargo, no sé si se ha dado cuenta pero ocurre algo muy curioso y es que por lo regular, el común de la gente no terminamos lo que iniciamos como dice Alberto Cortez en su canción, “el andar se vuelve rutina”.

En lo personal me pasa, y quizás se deba a que todo lo queremos hacer apreciado lector (a), por nuestras propias fuerzas, por una fuerza de voluntad inexistente, es más, a veces he llegado a pensar que la fuerza de voluntad no debería de existir, porque muchas de las veces la fuerza de voluntad es igual al fracaso.

Yo no soy nadie para aconsejar a nadie, pero si yo pudiera darle un buen consejo para el próximo año 2022 que está por iniciar y que como cada año se puede ver en el horizonte es prometedor y satisfactorio, es que ya no hagamos las cosas por nuestras propias fuerzas sino que todo lo que hagamos sea con las fuerzas de Dios; que todo lo que hagamos se lo entreguemos a Él; que nuestros proyectos se los expliquemos y le pidamos que los prospere.

Hay quienes piensan en que Dios no tiene tiempo de escucharnos pero no es así, Él nos ve y desde donde nos observa, puede escucharnos y sentir nuestra fe, es como la mujer del manto de la Biblia recuerda, Jesús sabía que ella había tocado su manto con mucha fe, que de Él había surgido un gran poder sanador.

Confesarle a través de mi propio testimonio que sé perfectamente que fue Él, quien me sanó por ejemplo del tabaquismo. Este próximo primero de Enero del 2022, estaré cumpliendo y lo digo con mucha fe, diez años que dejé de fumar.

Mañana es un día muy importante para mí, pero debo decir que, muy malo fue que después de haber sido sin ninguna presunción, un deportista consumado en diferentes deportes, poner un cigarro en mi boca porque se convirtió en un vicio que sin duda me pudo haber llevado poco a poco hacia la muerte, y más me gustó, cuando descubrí que era el complemento idóneo de lo que bebía.

Pero ese primero de Enero de hace diez años que fumando se lo entregue a Dios, le dije que por favor me ayudará a dejar de fumar, que yo no podía hacerlo solo, que necesitaba de su fortaleza porque yo no tenía fuerzas para hacerlo, ese mismo día apague mi cigarro en el cenicero que tenía sobre la barra de un bar y fue entonces cuando ocurrió el milagro, cuando verdaderamente pude dejar de fumar por la gracia de Dios.

Me había convertido de la noche a la mañana, en un esclavo de lo que conquisté.

Así es que si usted iniciará algo en este 2022, tiene algún proyecto en puerta y sobre todo es una persona de fe, hable con Él, solo recuerde que la Biblia dice que sin fe, es imposible agradar a Dios. En ese sentido, pídale lo que usted quiere, siempre y cuando no sea un capricho, usted es su hijo (a) y sé que lo escuchará; exprese a Él que necesita de toda su ayuda, de toda su fortaleza y entonces verá lo que ocurrirá.

Comentarle que este 31 de Diciembre es mi cumpleaños 56 y tengo metas y proyectos que quiero que Dios me ayude no para iniciarlos, sino para terminarlos, aunque también es muy posible que surjan otros detalles que quizás sean más importantes que los que tengo en puerta, no lo sé, solo Dios lo sabe.

También sé que muchas de las veces Dios no nos concede todo. Él sabe cuándo y en qué momento lo hará porque los tiempos de Dios son perfectos, como también es muy posible que nunca nos cumpla aquello que le pedimos con tanta fe, esto pudiera ser incluso, la salud del ser amado.

Decirle que las enfermedades no estaban dentro de los planes de Dios, es más, las enfermedades llegaron al hombre por el pecado original, sin embargo, Dios permite las enfermedades para sus más firmes propósitos, y aunque sabe que la muerte del ser amado nos duele mucho, seguramente a Él le duele más porque nos ama, porque es nuestro padre celestial, nuestro creador, y nos ama no por lo que somos, sino a pesar de lo que somos.

La palabra dice que Dios nos ama, y no lo demostró dando a la humanidad lo que Él más amaba, a su único hijo, a su hijo unigénito para morir por nosotros, por nuestros pecados.

Así es que mañana, y se lo digo sin fanatismos ni falsos triunfalismos, levantémonos con mucha fe y veamos todo ese sufrimiento, levantemos nuestros ojos hacia la cruz y reflexionemos que todavía nos falta mucho por hacer, por edificar y por construir.

Que pase un feliz, apacible y próspero año 2022.

Correo Electrónico: dere.cancela@gmail.com

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