Inocencio Yáñez Vicencio

Cuando Habermas nos dice que la vida es un aprendizaje, entiendo que quien se cierra a la universalidad, quien se encajona en el pensaminto único, quien se niega a aprender, es una forma de renunciar a la vida. En la Huasteca le rendimos respeto, no culto, a la muerte. Respetamos como pocos a nuestros muertos, muertos, no asi a los muertos en vida, a los que tienen prisa por pasar ya a la historia.
Andrés Manuel López Obrador, no nos preocupa tanto que no sepa. Finalmente es común escuchar que nadie nace sabiendo. El problema es que se niega a aprender. Ojalá recepcionara que según Max Weber, la diferencia entre el político y el científico es que él como político tal vez no requiera más que sensibilidad, pulso y olfato político, para tomar decisiones, pero para construir un aeropuerto, un tren o una refinería, hay que haber ido a la universidad y haber aprobado con éxito las asignaturas correspondientes. Por algo Lenin, al tomar el poder, cuando iba a tender vías para su ferrocarrril y electrificar su territorio, expresó que: un técnico vale más que mil revolucionarios. Y no se si por eso ahora no salga con que el fundador del primer Estado obrero, era neoliberal. El primer problema en Amlo es que todavía no se da cuenta que ya no está en campaña, que ya no necesita esas mañaneras para otra cosa que mantener movilizadas y adoctrinadas a las masas. En segundo lugar no quiere darse cuenta que una cosa es el titular del Ejecutivo ( que en México es además Jefe de Estado, es decir, donde recae la unidad de la nación, esto es, que debe integrar no fraccionar a la sociedad ), el gobierno y la administración. Que no sabe. Pues que se asesore de quienes si aprobaron la universidad. Bueno hay científicas Claudia Sheinbaum, que conocen de ciencia pero tienen tanto miedo a su sinrazón que sólo saben adularlo o remedarlo. Claro que no es lo mismo que le hagan a uno los libros que salen publicados bajo nuestra autoría que asimilar y explicitar una tesis. Tal vez no sea mucha ciencia gobernar como una ocasión expresó Amlo, pero administrar hacia dentro y hacia fuera, si que lo es. La muestra es que las superdelegaciones no le funcionaron. La cancelación del aeropuerto ( AIM ) significo, para comenzar, 321mil millones tirados a la basura. La refinería de Dos Bocas, se calcula, de arranque con un costo que triplica la que recientemente le compramos a los vecinos del Norte. El Tren Maya, se inicia sin ni siquiera estudios de impacto ambiental. La teagedia de la administracion de López Obrador, es que las pocas obras que emprende no surgen de las oficinas de quienes saben sino de su mente cerrada y caprichosa. Estoy de acuerdo que la técnica debe estar subordinada a la politica, pero zapatero a tus zapatos , las decisiones politicas deben quedar en manos de los políticos y las obras técnicas en manos de los expertos. De otra manera vamos a seguir poniendo nustra salud al resguardo de amuletos o de payasos.
En estos días el presidente dejó de asistir a un foro más de los países que deciden la economía en el mundo. Para los que ignoran que hoy la economía de los países está determinada en la mayor parte por variables que no controlan los gobiernos, eso no tiene importancia, pero para los que sabemos lo mucho que costó que México ingresar al G-20, para ser protagonista, eso es muy grave. Las reglas de la economía y el comercio se determinan en esos foros. Si México no asiste, pronto vamos a encontrarnos que esas ONGS que tanto odia, tendrán más fuerza para influir en la conformación del mundo, que nuestro gobierno. Si hubiera leído de Jacques Chevallier, El Estado posmoderno, se daría cuenta que la teoría clásica de Jean Bodino, sobre la soberanía esta hoy muy erosionada, basta que venga a nuestra mente la equiparación de nuestra Suprema Ley con los tratados internacionales firmados con la aprobacion del Poder Legislativo, para comprender la interdependencia. En 1995, cuando mi amigo Raúl Vázquez Montoya, me llevó con el ideólogo del PSOE en materia económica Ludolfo Paramio, y le pregunté ¿por que los socialistas en España, privatizaban? Me contestó que de no hacerlo quedarían aislados. Algunos por ignorancia, otros por perversidad pretenden desconocer que Peña, privatizó por capricho. No soñores. Privatizo, porque a diferencia del PAN no sólo tenía una parte importante del gobierno, tenían los sindicatos y las fuerzas, para hacerlo, pero principalmente porque la coyuntura intermacional favorecía a las fuerzas partidarias de la desregulacion y hacía tiempo que venían condicionando sus inversiones en ese rublo. Sólo un presidente que cree que está a finales del siglo XVI, cuando Bodino elaboró sus Seis Libros de la República, que si bien es cierto fueron el estandarte con que se edificó el Estado moderno, no pueden tener el mismo uso para el Estado posmoderno, a riesgo de quedar arruinados en nuestro aislaminto. La luz nunca podrá entrar en un túnel hermético, por lo menos necesita una rendija por donde se cuele.