Ya viene enero 2021 y con ese primer mes de año, viene también, sin duda, una terrible cuesta de enero. Más pesada y más terrible que las que se han padecido en años anteriores. Resumiendo, se puede decir que la del 2021, será la madre de todas las cuestas que han existido.

A la cada vez más lejana canasta básica, ese objeto de mimbre que anteriormente contenía lo indispensable para que una familia viviera y viviera bien – no como los mil pesos que regala el secretario de sedesol de Veracruz- se le han esfumado los alimentos básicos y ahora, aparte de andar flotando por el espacio, cada vez tiene menos con tenido y, por ende, menos sustancia; hay que agregarle los medicamentos para atender el Covid-19.

Sí, porque ahora, por los padecimientos del coronavirus, habrá que agregar a la canasta básica, como elementos de primerísima necesidad hasta el oxigeno que ahora se vende en tanques y que es requerido por quienes padecen el Covd-19.

La carne, leche, huevos, frutas, son alimentos que muchos mexicanos conocerán en fotografía o en comerciales de TV, pero que desde hace tiempo fueron sustraídos de la famosa canasta básica. Ya ni caso tiene mencionar la ausencia de pastas, cereales, cremas, yougures, etc.

La cuesta de enero del 2021, llega de la mano del famoso Covid-19, el virus que mantiene en el encierro permanente a millones de mexicanos y que, obviamente, impide a muchos desempeñar un trabajo que les permita llevar el sustento a sus hogares, por lo que la Cuesta se volverá más empinada que nunca.