Después de un lustro de espera, luego de una fortuna invertida superior a los 20 mil millones de dólares, luego del show mediático de Rocío Nahle al mostrar año pasado -para la foto- un litro quesque de gasolina y luego de cuatro anuncios de parte de López Obrador de que ya estaba lista la producción diaria de 340 mil barriles de crudo al día, finalmente Dios se apiadó.
De manera, no sé, acaso conveniente, quizás sospechosa y lo más segura tramposa, el próximo junio, en el marco de las elecciones, el elefante blanco de Dos Bocas, empezará a producir el 20% de toda la gasolina que se consume en el país “¡que se oiga fuerte en todo México!”.
Así que si usred hoy compró a 26 pesos el litro, espérese, de preferencia sentado, porque el 2 de junio valdrá 10 pesos.
Eso es lo que prometió ayer López Obrador luego de calificar “íntegra” a Nahle.
Dos Bocas pues empezará a producir chorrisimos de gasolina cumpliendo así su promesa cuando asumió la presidencia. La misma que un buen día prometió pero en favor de un sistema de salud como el del Dinamarca y de aquel otro compromiso con lo de un tren, el Tren Maya, para mover la tercera parte de la población y la misma producción nacional, no a 40 kilómetros por hora, sino como el Tren Aéreo de Cuitláhuac.
Así es que el próximo 2 de junio, el día en que se decide si la señora Roció Nahle, autora de uno de los tres fracasos emblemático del régimen, se lleva o no la gubernatura, el Peje nos sale con la embajada de que Dos Bocas empezará a producir cientos de miles de barriles de gasolina.
¿Usted le cree?
Y por si ello no fuera suficiente, en junio también el “Felipe Ángeles” también estará en condiciones para transportar a unos cinco millones de pasajeros y la carga aerea de las 50 aerolíneas que aterrizan en México.
Y ya para entonces la super o Mega-Farmacia, no la del Ahorro donde son bien careros, sino la del Peje, tendrá 20 millones de medicamentos… hasta para curar la roña.
Lo que hoy nos incumbe desde luego a los veracruzanos por la gran sorpresa del crudo, es el tema Nahle y su refinería de los 250 mil millones de pesos.
Con gasolina circulando por las venas de Dos Bocas, aunque todo esté bajo sospecha de que se mandaron a rellenar los tanques y que hasta una “pipa” se quemó por falta de seguridad en el vaciado, todo para dar la apariencia de que están al cien los depósitos de almacenamiento ¿Cuál sería ahora el pretexto de los 6.2 millones de veracruzanos para no votar por ella?
Que si sus mansiones, que si sus ahorros en dólares en destinos fiscales, que si los moches en la adjudicación de contratos para la refinería y obra pública de la SENER, CFE y PEMEX, que si la sobrina millonaria ya se peló al extranjero; que si la empresa “Huerta Madre” ya la escondieron, que si el marido tiene tres pensiones, terrenos y es el operador financiero de la esposa en las Islas Vírgenes, que si siempre se le olvida mencionar la residencia de Villahermosa ¡Que importa!
Que si carga con la opinión pública en contra, que si solo expresa verdades a medias y que la prensa internacional, nacional y parte de la estatal se le ha ido encima revelando en el día a día sus pillerías ¡Que Importa!
Que si no quedó claro que su hija Norma Rocío, será pluri, que si la comadre, Claudia Tello, la llamada “Reina del Ambulantaje” será Senadora, la hija de esta finísima dama, diputada y la nieta, menor de edad, alta directiva de la SEV ¡Que importa!
Que si el mendrugo que le arrojó a la media hermana de Cuitláhuac, la señora Dorheny García y que si el primo hermano del gober, Eleazar, está en el 16 de la lista de diputados y no será nada, y que a Zenyazen es un pobre diablo que deambula por los pueblos musitando ¡Viva Morena!, pues ¡Que importa!
Ya dijo el patrón que la impronunciable es una “íntegra” -que es el equivalente a honrada, que renta donde vive y que su salario es bajo- y lo asegura como si ello fuera suficiente para que el electorado cambie de opinión y diga ¡Cuánta razón tiene el abuelo!
Y no solo eso, sino que en automático, a pesar de las tendencias, de las encuestas de ellos mismos difunden, la opinión generalizada que la tiene como una corrupta, fuese suficiente para mágicamente cambiar de opinión.
A unos días de irse a “La Chingada”, López Obrador debería guardar silencio en respeto a quienes aun creen en él y no apoyar de esa manera tan burda a tan cuestionada dama a quien de la noche a la mañana le puso a funcionar “Dos Bocas”, la de ella y la propia.
Tiempo al tiempo.

*Premio Nacional de Periodismo