Vaya que hoy en día existen demasiados políticos desmemoriados, esos que muerden la mano que le dio de comer. Tal es el caso del tal Christopher, el mismo que hoy llama corruptos a quienes fueron sus patrones y con quienes trabajo en administraciones municipales. Es por lo anterior que ya no sabe que inventar para llamar la atención de su media docena de seguidores. Christopher Alan Santos, quien se autodenomina “El Gallo”, es un expriista que encontró en Movimiento Ciudadano, un espacio para seguir viviendo del erario público, porque de algún trabajo formal no se le sabe. Sí, el mismo que fue director de Catastro en el Antiguo Puerto México, durante la administración de Joaquín Caballero Rosiñol, a quien juraba lealtad hasta el fin del mundo, porque en aquellos tiempos eran uña y mugre, eran fieles seguidores del PRI, el partido de Javier Duarte y que siempre presumió apoyarlo. Incluso los porteños rumoran que durante su encomienda como funcionario en lugar de ayudar al pueblo se hizo de uno que otro terrenito. Con que cara ahora llama a sus ex jefes que son corruptos y rateros, pobres alcaldes que le dieron chamba a este nefasto personaje. El ahora entenado político de Dante Delgado únicamente puede presumir de haber tapado unos cuantos baches y limpiar uno que otro parque, tareas que solo hace en tiempos electorales y todo para salir en la foto. Lo curioso es que sus amistades lo califican de fifí. Ahora dice que solo hay dos opciones la de los corruptos y la de él, pero sí son lo mismo, ¿Qué no?, o será que ya al unirse al naranja se purificó y es honesto. Por favor. Pero lo más ruin que pudo hacer este gallito, fue engañar al ahora candidato a la diputación federal, el doctor Pepe Aynes, a quien primero le dijo que sería candidato a la diputación local, pero tras enterarse de que la carta fuerte de Morena era Cheva Cortes de inmediato se bajo de la contienda local, ni tarde ni perezoso le pidió el cambio… sus malquerientes se preguntan si acaso ¿será que le tiene miedo a Cheva?… Ahora asegura que Miguel Pintos no es rival para él y presume encuestas pagadas donde alardea que va en primer lugar. Lo más triste es que este Gallo cree que engaña a la gente con sus tenis naranjas, lo más seguro es que se autoengaña. Ya le pago hasta Badabum para que lo promocionen, mejor que pague el iPhone que quedó a deber a un reportero de su ciudad. ¿Si, el gallo estuviera seguro de que ganaría, porque le urge hacer ruedas de prensa para atacar al candidato de Morena?, o será que realmente esta consiente de que hay que atacar al rival más fuerte. Lo triste es que sigue con sus dimes y diretes y no hace propuestas claras. Una campaña se gana con propuestas y no con ataques, menos con encuestas pagadas… Sin duda es el canto de un gallo desesperado. Provecho.