Le van a aplicar la misma fórmula que le impusieron a Franco y a Gómez

Walter Ramírez Aguilar

Con el arranque las campañas federales el pasado 4 de abril y de las locales que empezará el próximo 4 de mayo, el gobierno represor de Cuitláhuac García Jiménez, le apuesta a la desmemoria colectiva y anida la esperanza para que el día de las votaciones, el gravísimo asunto del delito de ultrajes a la autoridad desaparezca completamente de la cabecita de los electores y queden impunes los atropellos cometidos en contra de los dos aspirantes a cargos de elección popular del PRD, que hoy están en la cárcel porque así conviene a los intereses del bueno y honesto gobernador de Veracruz.

El abuso de poder impuesto a Rogelio Franco Castán y a Gregorio Gómez Martínez, por haber ultrajado a la autoridad, sin pruebas que demuestren esas argucias jurídicas infames, dejan como ya lo hemos dicho en dos despachos anteriores, es un completo estado de desprotección a la ciudadanía, que está inerme ante los excesos gubernamentales, sólo por ser opositor político o ciudadano y en riesgo también por expresar el derecho a la libertad.

Hoy, cuando apenas están por cumplirse 10 días de haberse presentados sendos recursos de Acción de Inconstitucionalidad, por los diputados locales del PAN y por la Comisión Estatal de Derechos Humanos, en los que se ataca la falta de “Taxatividad ” de la Norma, así como su “Progresividad” y “Principio”, al endurecerse las penas contenidas en los artículos 331 y 371 del Código de Procedimientos Penales, no sobra mencionar que de esa fecha hasta que exista una resolución que emitan los Ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, transcurrirán al menos 18 meses y para entonces, es probable sino seguro que tanto Rogelio como Goyo andarán libres y sin cargos, porque nada demuestra que ambos políticos perredistas hayan ultrajado a la autoridá.

Y mientras son peras o manzanas, no sobra mencionar el riesgo que corre el perico de Don Arián quien debe poner sus barbas a remojar, ya que si sigue como ahora anda y lo llegan a escuchar los orejas del gobierno, el Bola Ocho o el propio gerber –perdón quise decir gober– Cuitláhuac, le van a aplicar la misma fórmula que le impusieron a Franco y a Gómez, porque después de que el cotorro escuchó a Don Arián, ahora no deja de repetir: PUTO EL QUE VOTE POR MORENA.