** Sus operadores, deciden
** Figuras decorativas
Por Sandra Peñaloza Jácome
Cuando el 2 de diciembre de 2019, Yolanda Cecilia Castañeda había sido derrotada por lo que llamó una votación amañada, donde incluso al más puro estilo panista se habló de la compra de votos de los presidentes de sala, en su cara le espetó a Sofía Martínez Huerta, que era una ignorante y que el Poder Judicial se vendría abajo.
Muchas pensamos, que eran los simples desahogos de la frustración de la amiga de Miguel Ángel Yunes Linares, resultado del despecho y de que sabía que el tren que llevaba al sexto piso del edificio principal del Palacio de Justicia, se le había ido para siempre.
Atrás de la elección de Sofía Martínez Huerta, estaba la mano del propio ex presidente del PRI y después chaquetero Panista, Edel Álvarez Peña así como Miguel Ángel.
Edel ya había colocado a su alfil favorito, el embajador Zeta, junto a la prima de la jefa, allá en la zona del edificio de la fiscalía, cubriendo su salida del poder Judicial ante una eventual denuncia.
El llamado cara de muela, también ya había hecho amarres en la legislatura del estado, con el entonces presidente del Congreso en turno, para lo que habría utilizado a POMPIN, Andrés Cruz Ibarra, quien, en diversas ocasiones, acudió a la oficina del pastor d los legisladores, dependientes todos siempre del Bola Ocho, el titiritero desde palacio de gobierno.
Se gestaba el escudo protector para Edel Álvarez Peña, a quien no se tocaría, una de las condiciones para no buscar la relección en la presidencia del Poder Judicial de Veracruz, donde tanto él como sus compinches y sus numerosas muñecas, tenían las bolsas y cuentas bancarias llenas de lana y con muchos contratos por cobrar.
Aparentemente el Tribunal quedaría tranquilo con la salida del ex presidente municipal de Coatzacoalcos y de la oficina principal del Palacio de Justicia, atrás quedaba un cochinero donde el cuento de limpiar la corrupción quedaba solo en eso, un discurso más que cualquier político de barrio. Semanas antes, Cuitláhuac ya había nombrado a varios magistrados, entre ellas a algunas damas muy cercanas a la 4T y otros francamente sus amigos, que arribaban solo por eso; se tornó entonces, también un basurero la carrera judicial y tal y como ocurrió la semana pasada, donde arribaron los enviados de la Legislatura, para asegurar puesto y blindaje, ante la posible derrota de morena en las elecciones del seis de junio.
Cuitláhuac y Morena, así como Andrés Manuel, no se percatan de que el enemigo está en casa, lo mismo llegado de las filas panistas que del pri. Aquí está el mejor ejemplo.
El primero en tirarse a los pies de Sofía Martínez huerta, sería POMPIN, Andrés Cruz, quien ni tardo ni perezoso se hizo necesario ante la ignorante e inexperta presidenta del Tribunal, mujer que el único movimiento que hizo fue el de su look, aunque después siguió la política de mantener el llamado “Tribunal de lo Familiar”, pues hasta el perro aparecía en nómina, sin embargo, el vulgo le aplicó aquello de que aunque la mona se vista de seda…
La tía Sofía aparentemente, cumpliría la encomienda de AMLO, pero lo primero que hizo, fue no romper del todo con algo que viene siendo sello de los Tribunales.
En puestos principales, aparecieron su nuera, amigas, amantes de sus protegidos y demás especímenes afines a ella y familia.
Sin embargo, lo registran los medios de comunicación, los problemas surgieron porque los dineros de las fraudulentas ciudades judiciales, que contrató a largo plazo Cara de Muela y que mensualmente le correspondería pagar al Poder Judicial, casi veinte millones de pesos a los beneficiarios, ligados a Edel, dejaron de cubrirse, según declaraciones en medios de comunicación ha realizado Sofía Martínez.
POMPIM empezó a manejar la situación en el Consejo de la Judicatura en contra de Sofía Martínez Huerta, apoderándose poco a poco del Consejo de la Judicatura y haciéndola firmar nombramientos para proyectar a sus incondicionales, de uno y otro sexo y por supuesto, no desaprovechó la oportunidad para convertir en juez a su hijo.
Para taparle el ojo al macho, permitió que otros magistrados metieran mano, más a fondo, en algunos puestos, en los diversos juzagdos de la entidad y en la propia lana del fondo auxiliar. Total, la que firmaba era la Chofi, quien generalmente permanecía encerrada a piedra y lodo, pero recibiendo solo a la gente que le enviaban desde la legislatura o de la oficina del titiritero mayor, Bola Ocho.
Dicen, los que conocen que los malos consejos de POMPIN tienen en el cadalso a Martínez Huerta, quien entre sus tonteras provocó la salida de Roberto Dorantes Romero, de quien nunca se percató contaba con la protección y amparo de la justicia federal, contra cualquier movimiento por rebasar los setenta años de edad.
Pero no solo eso, sino que en el colmo de la traición, arrastró a Lezama Moo, aquel que la propuso en diciembre de 2019 para ser presidenta del TSJ, cuando borraron a Yolanda Cecilia.
Lo demás vino solo, le explotó el asunto de un juez que la denunció ante la legislatura, la bronca con los propios legisladores instigada con olor a Coatzacoalcos por el que se fue a través de POMPIM, hasta el asalto al Palacio de Justicia, cuando mal orientada, jamás se percató de que el final estaba cerca.
Al despertar al día siguiente, se enteró que habría una reunión plenaria de donde surgió Isabel Inés Romero Cruz, como nueva presidenta.
Con la llegada de Isabel Inés Romero, nos cuentan que la hipocresía nuevamente se hizo presente.
La propia Yolanda Cecilia y Concha Flores, que habían pugnado por borrar a Sofía Martínez Huerta, pensaron en un panorama benéfico para el Poder Judicial del Estado y ellas mismas, pero no, las cosas iban por otro lado.
Ya se había utilizado al Consejo de la Judicatura y al inexperto Humberto Oliverio Reducindo, quien igualmente tampoco se percató de los movimientos, donde el emisario de Edel Álvarez, movía los hilos.
Nuevamente, vino la orden, cero política de puertas abiertas en la presidencia del tribunal donde siguiendo la escuela dejada por Edel y reforzada por Sofía Martínez cero trato al público y pares, solo los consentidos.
El Poder Judicial, aparentemente manejado una vez más por una dama, en realidad obedece a señales que vienen desde zonas del Poder Judicial distintos al sexto piso, la legislatura y de Palacio de Gobierno, lo que es público y notorio, pues Isabel Romero Cruz ha confesado públicamente que obedece e sus acciones a instrucciones del gobernador.
la negociación con el que se fue y su alfil, POMPIN, haga y deshaga a su antojo, pues incluso, ya tiene lista a la que será la tercera presidenta del Tribunal Superior de Justicia, que no es Yolanda Cecilia Castañeda ni tampoco Concepción Flores Saviaga, pertenece a una de las últimas generaciones y obedece a los dictados del emisario panista.
Mujeres juiciosas, pensantes y conocedoras, existen en el propio tribunal, muy ajenas a las grillas baratas, que si se trata de prolongar la estadía del género femenino en la silla principal del tribunal, existe y es de pensarse que no permitirían ser manejadas por los titiriteros y su alfil, es cosa de que se decida a buscar verdaderamente acabar con la corrupción y el nepotismo.
Pero como algún día dijo Yolanda, la pitonisa del Poder Judicial “ahora, cualquier…PEND… es magistrado” Frase que la haría famosa y que el dos de diciembre de 2019, también incluyó al género femenino, pero en ese entonces solo aludió a Sofía Martínez, a la que no le perdonó haberla derrotado en la mañosa elección que fuera dirigida desde palacio.
FABRICA DE TITULOS
La impreparación e improvisación de funcionarios surgidos de la 4T, así como servidores públicos de nivel intermedio, otorgándoles preferencias laborales sobre probados ciudadanos capacitados verdaderamente, lo que se volvió una costumbre maligna desde el primero de diciembre de 2018 a nivel nacional y Veracruz, no fue la excepción.
Se recordó, la frase aquella de que ahora cualquiera es licenciado, pues nos sorprendió mucho conocer que la “licenciada” Olga Lidia Serrano Vargas se presente con el título de licenciada, aunque en el medio periodístico que conoce que no paso de la secundaria, pero tiene seguramente otros méritos que el bola ocho o}conoce, pero lo que no sabe es que “el acérrimo enemigo” de morena, Miguel Ángel Yunes Linares, la tiene entre sus agentes favoritos, de los muchos que operaran en el poder judicial de Veracruz, donde existen magistrados, jueces, secretarios y muchos empleados, de lo que se percatarían en forma muy sencilla pero que no corresponden a esta redactora darles a conocer.
¿O será que acaso el colocarle a Olga el nombre de Olda Lidia Serrado Vargas es para despistar el enemigo? Y ahí se los decimos, aparte del personero de Edel, Pompin y otros, Yunes Linares está metido hasta la cocina del poder Judicial de Veracruz