Alfredo Bielma VillanuevaAlfredo Bielma Villanueva

La propuesta presidencial a favor de Victoria Rodríguez para integrar el Consejo del Banco de México, y acaso convertirse en su gobernadora, ha levantado un sinfín de expectativas, entre ellas las que atribuyen a ese anuncio incertidumbre en el mercado de valores porque, dicen, carece de experiencia en política monetaria, si bien la tiene bien ganada en asuntos de finanzas públicas. Por cierto, no abona mucho al optimismo el hecho de que el presidente destaque el evento como “un cambio” en la institución, solo porque sería la primera mujer en presidir ese Banco, que dejaría de ser “El Club de Toby” y “eso ya comienza a cambiar”. Obviamente, el prurito del presidente consiste en subrayar su querencia a designar en cargos públicos de alto nivel a elementos del género femenino, tal como lo hizo al enumerarlos en gobernación, con Olga Sánchez, la recién electa ministra de la Suprema Corte, la Secretaria de Protección Civil, entre otras. Porque de eso a que vaya a haber un cambio sustancial en el Banco de México por el nombramiento de Victoria Rodríguez existe un largo trecho.